El Valle del Cibao
En el corazón de la República Dominicana, la majestuosa región de Cibao, conocida como "El Cibao", se alza como un verdadero emblema de calidad y excelencia en la fabricación de puros. Esta región, que se encuentra en la porción norte del país, se encuentra delimitada por la frontera internacional con Haití al oeste, la imponente cordillera central al suroeste y sur, la sierra de Yamasá y Los Haitises al sureste, y la bahía de Samaná al este, mientras que al norte se extiende el vasto Océano Atlántico.

Sus impresionantes ríos, el Yaque del Norte y el Yuna, serpentean por sus cuencas y valles, albergando la mayor parte de su población. Otros habitantes se congregan en los Llanos Costeros del Atlántico, donde la ciudad de Santiago de los Caballeros divide la región en dos, cada una con sus propias características climáticas ligeramente diferentes. Mientras la parte oriental, bañada por el río Yuna, disfruta de un clima más húmedo, la zona occidental, bañada por el río Yaque del Norte y limitando al oeste con la frontera dominico-haitiana, es menos húmeda pero igualmente asombrosa.
Esta región, que no solo posee una rica identidad cultural sino también una larga tradición de manufactura de puros de alta calidad, conforma una "macrorregión de desarrollo". A pesar de no destacar por su industria diversificada, sus habitantes gozan de niveles de progreso notables, elevada escolarización y una calidad de vida envidiable entre las tres regiones de la República Dominicana. Históricamente, El Cibao ha sido el símbolo de la prosperidad económica en el país, gracias a su abrumador legado español y su destacado desarrollo económico.
El nombre "Cibao", que se traduce como "lugar donde abundan las rocas", fue inicialmente un término utilizado por los nativos para describir la isla en su conjunto, pero los españoles lo adoptaron durante su conquista para referirse específicamente a esta región, otorgándole títulos como "lugar de abundantes aguas" y "lugar donde hay oro", haciendo referencia a los fértiles valles entre las cordilleras Central y Septentrional.
El Cibao, con su belleza natural y rica historia, se erige como una cuna de la cultura dominicana y un destacado epicentro de la fabricación de puros de calidad premium. Su combinación única de tierras fértiles, recursos minerales y hermosas costas a lo largo del Atlántico la convierten en un tesoro inigualable. Además, su dialecto distintivo y su contribución al merengue típico, el perico ripiao, la hacen verdaderamente única en la República Dominicana. A través de los siglos, El Cibao ha sido el hogar de valientes patriotas y líderes, que han desempeñado un papel fundamental en la historia de la nación, consolidando su importancia en el alma de la República Dominicana.